jueves, 23 de enero de 2014

Lección de vida

A mi madre este año los Reyes Magos le han traído un libro, algo bastante habitual en ella que anda siempre con uno entre las manos. El que le dejaron el día 6 de enero en casa es el de María de Villota, La vida de un regalo, un libro en el que la que fuera piloto de Fórmula 1 narra cómo cambio su vida tras sufrir un grave accidente cuando realizaba unas pruebas de conducción en un circuito de Inglaterra.

Nada más terminárselo ella, me lo he leído yo también. Al principio, reconozco que lo empecé sin mucho interés, por simple curiosidad después de que mi madre me adelantara algunos detalles, pero he de reconocer que al cabo de cinco minutos estaba totalmente enganchada.

Una lección de vida que María de Villota describe en su intensa pero corta odisea de lucha y superación tras su accidente, que merece ser leída. No sólo porque supo ganarse su lugar en un mundo de hombres, sino porque luego también fue capaz de salir adelante tras el duro trance que sufrió el 3 de julio de 2012 en el aeródromo de Duxford. 

No os cuento nada del libro, para que os animéis a leerlo si os apetece. Pero os dejo la dedicatoria que tiene al principio, que ya da mucho que pensar...

Y un día te das cuenta de que vivías dormido, pasabas a ciegas y sentías a medias. Si un accidente no ha parado en seco tu vida, vive soñando, pasea observando y ama apostando. Si un accidente ha parado por un momento tu vida, sabes de lo que estamos hablando. Este libro es para vosotros.

La vida es un regalo (2013) De Villota, María. Ed. Plataforma Editorial


miércoles, 22 de enero de 2014

Difunde una información, ¡pero sé el primero!

Quentin Tarantino / EFE
Como cada tarde, ojeo los periódicos digitales para enterarme de aquello que a lo largo del día no he tenido tiempo de leer. Por las mañanas centro toda mi atención en las informaciones que atañen a mi ámbito de trabajo pero al terminar -depende de la hora, eso sí- me gusta siempre echar un vistazo tranquilamente, sin el agobio del reloj.

En elmundo.es descubro, por casualidad, que el director de cine Quentin Tarantino ha decidido no seguir adelante con el proyecto que tenía entre manos para rodar el próximo invierno, después de que el contenido de su guión "The Hateful Eight", un western coral, haya sido filtrado. La gracia que le habrá hecho enterarse de que su última creación andaba correteando ya por las manos de medio Hollywood... "Estoy muy, muy deprimido" ha dicho Tarantino al portal Deadline.com.

La cosa es que supongo que no sólo él estará deprimido sino también el resto de mortales que nos vamos a quedar sin ver el resultado de su ingenio en la gran pantalla... y todo... por querer saber antes que nadie la información...

Un día, en la Facultad de Comunicación, un profesor nos contó que si tienes el poder de la información, lo tienes todo. Incluso la economía, que parece ser la reina de todos los males, también se mueve por la información. Un aspecto, por cierto, que se ve muy bien en la película "Wall Street" de Oliver Stone. 

Sin embargo, si de información se refiere el asunto, Internet sí que es la reina en todos los sentidos. Francamente, creo que para muchos de los que nos dedicamos a esto de la comunicación nos resultaría harto complicado no utilizar por un día la red para acceder a comprobar un dato, buscar un teléfono, encontrar un cargo o releer informaciones sobre un tema.

Lo fácil que se nos han puesto las cosas ahora con las tres W (Word Wide Web), pero lo complicado que nos lo hacen algunas veces. Me refiero al hecho del poder que tienen para difundir rumores y destrozar nuestra gran preciada intimidad, aunque en muchas ocasiones seamos nosotros mismos los que nos empeñamos en contarle al mundo todo lo que nos pasa y en el momento que nos pasa. 

Eso es lo que le ha ocurrido hoy a Quentin, él sólo quería compartir su información con seis amigos... aunque al final han sido unos cuantos más. Seguro que al enterarse habrá dicho algo así como "No es que me enfade... ¡pero da coraje!". En fin, coraje es el que nos da a nosotros que ese guión no se vaya a convertir en éxito de taquillas, pero tranquilo Tarantino... que tampoco nos enfadamos.

martes, 21 de enero de 2014

Como en casa

Y verdaderamente así me siento... como en casa. Dicho sea de paso que es ahí donde me encuentro en estos momentos pero, valga la redundancia, la casa la pone uno donde quiere y puede. En mi caso, la salita de estar en mi sitio favorito, donde prácticamente haces de todo; comer, hablar, discutir, descansar, leer... 
Y por eso, este sitio será su traducción "online" para escribir, debatir y reflexionar sobre lo que cada uno quiera...

Pasen y lean... sean todos bienvenidos y siéntense, que están como en su casa...